Cuando la mujer se enfrenta a un diagnóstico de cáncer de seno también lo hace a la posibilidad de ver transformado su cuerpo debido a las operaciones y tratamientos a los que puede ser expuesta.

Por eso, la posibilidad de una reconstrucción de seno está presente en la mayoría de los casos. El cirujano plástico Antonio Busquets señala que este procedimiento se cataloga como una cirugía oncológica en la que, aunque en la actualidad se trata de eliminar la menor cantidad posible de piel, muchas veces es necesario eliminar no solo el tumor sino también la piel, el pezón y hasta la areola

“El tipo de reconstrucción va a depender de cuánto tejido se removió”, asegura el cirujano plástico de Busquets Plastic Surgery.

Según el experto, graduado del programa de cirugía plástica de Emory University en Atlanta, existen cirugías reconstructivas disponibles que están al alcance de las pacientes, sobre todo porque son cubiertas por la mayoría de los planes médicos.

“Son cirugías que quedan bien. La satisfacción de los pacientes que se reconstruyen los senos está entre 80 y 90%”, menciona.

Opciones de reconstrucción

Busquets señala que entre las cirugías de reconstrucción posibles tras una mastectomía, se encuentran las siguientes:

1. Cirugía oncoplástica

En esta cirugía se utiliza el mismo tejido que el oncólogo dejó porque lo pudo salvar. Si solo se extirpó un tumor de un seno, al otro se le hace reducción, aumento o levantamiento, según sea necesario para que ambos pechos queden simétricos.

2. Cirugía reconstructiva de seno con implante

De acuerdo al tipo de mastectomía, se puede introducir el implante en la misma operación.

“Si la piel quedó muy finita, entonces se puede reforzar con el músculo lattisimus de la espalda, o con malla de cadáver para que lo sostenga. Esta malla luego será absorbida por el propio cuerpo”, explica Busquets.

3. Cirugía con reconstructiva con tejido del abdomen

Si le remueven piel, pezón y nódulos de la axila, se realiza una reconstrucción que usualmente se hace utilizando grasa del abdomen (Transverse Rectus Abdominal Muscle). Este tipo de intervención se combina con una abdominoplastía, porque con esa grasa que se extrae es que se reconstruye el seno.

“Mi profesor en Atlanta, el doctor Carl Hartrampf, creó este método, frecuentemente utilizado, en donde el cirujano plástico certificado efectúa un corte en el abdomen similar al que se hace en una abdominoplastía. Luego, hala por dentro la piel del abdomen, la pasa por un túnel subcutáneo del abdomen al seno, la hace llegar hasta la posición del seno y crea con esa piel, sin haberla desprendido del cuerpo, una bolsita que se convierte en un seno”, explica Busquets.

4. Uso de expansor

Éste se usa cuando se quiere utilizar un implante, pero el seno no está listo todavía para ser reconstruido. En algunas ocasiones la piel quedó afectada después de la mastectomía y no está lista para sostener el implante.

“Usualmente hay que poner un expansor de tejido que se va llenando cada dos semanas hasta llegar al volumen que el paciente quiere y luego se cambia por un implante. Usualmente son pacientes que no le han tenido que remover piel del seno”, menciona.

En general, estas cirugías pueden realizarse inmediatamente después de la resección del tumor o tiempo después, de acuerdo a la realidad de cada paciente.